El impacto fué y es grande para todos. Los colaboradores son parte vital de las organizaciones y estar con ellos, acompañarlos en este camino en el cual las incertidumbres son grandes, nos obliga a prepararnos ágilmente a los cambios.
Es tan importante que el equipo se encuentre anímicamente preparado y alineados a esta nueva etapa de transición, a este propósito, como tener un plan ganador para nuestra empresa.
Desde el coaching podemos hacerlos protagonistas y gestores claves de este momento brindándoles canales para que ellos mismos puedan proponer mejoras y cambios.
Hoy el liderazgo colaborativo parece ser la vacuna perfecta para los tiempos de cambios de mindset organizacional.
Debemos flexibilizar estructuras, es importante trabajar en ganar agilidad, construir las habilidades y flexibilizar a los equipos para tener redundancia en quienes pueden ayudar, tomar tareas y decisiones.
No sólo nuestro management tiene que cambiar, es importante, además, reconstruir nuestra empresa como un organismo viviente para actuar rápidamente, trabajar junto a recursos humanos para la toma de decisiones estratégicas y que colabore a incentivar la agilidad en los cambios y ser una empresa resiliente orientada a la acción.